En el año 2011 la agrupación decide hacer una total y completa remodelación de su uniforme de gala, pretendiendo crear una imagen propia y característica a esta formación musical.

El uniforme está basado en la uniformidad de los mariscales franceses del siglo XVIII - XIX. Teniendo clara su elección, la agrupación se decidió apostar por este estilo de uniforme, novedoso en el ámbito de las agrupaciones musicales y adaptandolo a su simbología.

La confección del actual uniforme de gala de la Agrupación Musical Nuestra Señora de las Angustias les condujo a un uniforme más vistoso y de mayor elegancia que el anterior siendo de gran aceptación por parte de músicos y de público dentro del argot cofrade.

La agrupación decidió adaptar el uniforme con respecto a sus necesidades, pero sin dejar atrás detalles muy significativos del uniforme original.

 

  • Se optó por una levita que cerrara a la altura de las rodillas, la cual luce un bordado central similar a la del antiguo mariscal, uniéndola con botonería en su parte central.
  • Cabe destacar el cuello, siendo diseño propio, completamente bordado en plata y uniendo los extremos con el icono de nuestra cofradia en el centro del mismo, siendo de forma similar al del antiguo mariscal.
  • Se cambió el cuello cerrado por uno más abierto y añadiéndole un pañuelo, un elemento atípico de este tipo de uniformidad.

Se sustituye el fajín que originalmente posee el mariscal, e introduciendo un ceñidor color plata unido a una hebilla del mismo color con el escudo de la cofradía.

 

Cabe destacar la botonería, que está personalizada con el escudo de de la cofradía. Dicha levita está bordada de forma simétrica en color plata, cuyo diseño está inspirado en el manto de nuestra titular, la Virgen de las Angustias.

Un cambio memorativo es el tipo de gorra que se adopta, pasa de la gorra de plato al tipo de gorra Ros , de color blanco y con el escudo de la cofradía.

Los pantalones posiblemente sean lo más sencillo del uniforme de gala, siendo un pantalón negro totalmente liso, y confeccionado de la misma tela que la levita, no llevando ningún tipo de adorno. Y para acabar con zapato clásico de charol, dando una austeridad necesaria para poder procesionar detrás de cualquier imagen de Semana Santa.